Acidifico mi dermis
con plasma espacial
Bajo el cielo
cámbrico de un primitivo planeta;
Cada neurona de
mi ser copula hasta arder.
Chasqueo mi
amarga dentadura;
Dendritas
derrochadas por millones,
Efímeras e
inflamables construyen ideas inocuas.
Fumo crack
ideológico, reciclado;
Grazno
entrecortadamente y cuento…
Humeo como una
locomotora a punto de partir.
Inhalo
suficiente paranoia,
Jodo entre
sueños acuáticos y respiro
Kilos de
felicidad.
Lamo el papel,
casi vacío, donde escribí:
“Lloverá el
invierno infinito en mi casa,
Maldeciré a
quien dejara de traerlo”.
No se detiene la
veloz
Ñandú que corre a
través de mis ojos
Opta por girar y
manosear mi libido.
Primero desearía
aterrizar y salir;
Quisiera vomitar
estrellas fugaces y
Rolar por bacanales
domingueros.
Salto
abruptamente a través de la realidad
Tergiversando algunas
paredes cuánticas;
Ubicuo soy,
dentro de ti.
Vuelo a través
del humo y exclamo…
What a hell?
Xochimilco arde
en mis pupilas.
Yace mi alma
bajo una lluvia de estrellas
Zarpo a mi
destino, pero ese no es el final…
Keine Kommentare:
Kommentar veröffentlichen